La crema de mantequilla es la golosina más deliciosa y me encanta decorar todos mis cupcakes y pasteles con ella. Mantiene su forma, hace que mi horneado se vea increíble y su sabor es solo una ventaja adicional. Muchas veces, por conveniencia, tiendo a usar esencia de vainilla como mi saborizante de crema de mantequilla. Pero, con el tiempo y mucho horneado, se vuelve un poco aburrido. Solía ​​​​cambiarlo con sabor a almendras, pero a mis hijos no les gusta tanto. Y en mi intento de hacer nuestras dietas un poco más saludables, aunque no mucho, tuve una idea. Para mi próximo lote de cupcakes, decidí incorporar un poco de fruta fresca en mi receta. En la buttercream, en concreto, daría sabor sin tener que recurrir a una esencia. Así que hoy estamos haciendo un glaseado de crema de mantequilla con cerezas frescas.