Paso uno: agregue agua o jarabe de maíz
Mientras hace su glaseado real, puede agregar unas gotas de agua o jarabe de maíz para ayudar a mantenerlo suave. Comience con solo un par de gotas de agua, mézclelo con el glaseado y agregue más si es necesario para alcanzar la textura deseada.
El jarabe de maíz también ayudará a que el glaseado no adquiera una consistencia dura. Se pueden agregar hasta dos cucharadas de jarabe de maíz a una libra de glaseado real.
Paso dos: mantenga el glaseado real suave mientras lo usa
Mientras usa su glaseado real en una manga pastelera, manténgalo suave colocándolo en un tazón o vaso con una toalla de papel húmeda en el fondo.
La humedad de la toalla húmeda evitará que el glaseado real se endurezca y evitará que la punta se obstruya. Este es un gran truco para cuando estás usando múltiples colores de glaseado real para decorar y tienes varias mangas pasteleras que estás usando.
Paso tres: guarde su glaseado real sobrante
Una vez que haya terminado de decorar, querrá asegurarse de almacenar adecuadamente su glaseado real. Esto evitará que se ponga duro y crujiente.
Para ayudar a evitar que el glaseado real se seque o se endurezca, es importante mantenerlo sellado. Cuando guarde el glaseado real, guárdelo en un recipiente hermético, con una cubierta de envoltura de plástico en la superficie. Esto mantendrá el glaseado real suave y evitará que se endurezca.
Si tiene su glaseado real en una manga pastelera, puede atar el extremo con una banda elástica. Esto ayudará a mantenerlo suave sin tener que sacarlo de la manga pastelera.
También puede usar una toalla de papel ligeramente húmeda sobre el glaseado real cuando lo guarde en un recipiente hermético. Esto evitará que la formación de hielo se forme una costra.
Al hacer su glaseado real, es importante no mezclarlo demasiado, ya que puede crear una textura rígida.