Precaliente el horno a 350 grados Fahrenheit. Luego, engrase y cubra el molde para pasteles.
Luego, en un tazón, mezcle la harina, el polvo de hornear, el bicarbonato de sodio y la sal.
Luego, prepare el tazón de su batidora de mano o de pie. Después de eso, bata la mantequilla a velocidad media-alta hasta que quede suave. Luego, a baja velocidad, agregue gradualmente el azúcar granulada. Luego, durante aproximadamente dos minutos hasta que quede esponjoso, asegúrate de batir a velocidad media-alta. No olvides usar una espátula de goma para raspar el fondo del tazón para incorporarlo bien. Después de eso, incorpora el extracto de vainilla.
Luego, a baja velocidad, agregue con cuidado los huevos uno a la vez. Después, bátelos en la mezcla. Luego, a velocidad media, agregue alternativamente el suero seco y el suero de leche en una secuencia seco-húmedo-seco-húmedo-seco. Después de eso, batir durante dos minutos hasta que la mezcla se incorpore completamente. Con esto, trate de no exceder la velocidad media, o la mezcla se mezclará demasiado.
Después de eso, raspe e incorpore la mezcla. Luego, asegúrese de agregar unas gotas de colorante rosa para alimentos. Posteriormente, añade unas gotas más si quieres conseguir un color más oscuro.
Luego, hornee el pastel a 350 grados Fahrenheit durante unos cincuenta minutos. También puedes usar un pincho para insertarlo en el centro del pastel. Con eso, está bien si sale limpio. Por último, enfríe sobre una rejilla durante al menos una hora antes de cortar y glasear.